martes, 18 de agosto de 2009

Un mal año para los mulás

Ahora que la prensa ya ha gastado su atención con respecto a la situación en Irán, podemos evaluar mejor la situación allí de un punto de vista menos enfocado por las elecciones. El error más grave de la prensa fue que ella consideraba a los crimenes contra manifestantes en Tehran conducto sorpresante. Éste actitud es una de las razones porque el régimen vil allá continua ser una amenaza al bienestar de su región. Pues quizá debido de ahí equivocada actitud a los hechos, la media ha hecho un servicio importante en enfatizar las mentiras de los mulás iraníes.

Las problemas del régimen islámico en Tehran no empezaron en junio. Hace 2005, hemos visto la desintegración de la opinión público en respecto del Presidente Mahmúd Ahmadinejad, tanto entre sí y también fuera de Irán. El presidente llegaba a su puesto prometiendo que Irán tuviera un papel más activo en exportar la revolución islámica a otros países, como Líbano. En 2005, los libanéses contestaron a las intenciones de Irán, y más importante a su aliada Siria, cuando ellos votaron contra el bloque fundamentalista chia Hezbolá y elegieron el político centrista Fuad Siniora al puesto de primero ministro. ¿ Como repusieron en Tehran? Los mulás daron ellos patrocinio a una ofensiva violenta contra Israel, empezando con el triunfo de Hamás en elecciones palestinas, y continuando con matanzas contra opositores palestinos y una guerra en Líbano.

El fracaso de los esfuerzos de Hezbolá y Hamás es el tema de muchas discusiones y discursos. Entre partidarios de la causa islamista o anti-occidental, ellos no están fracasando, sino la alianza occidental ha fallecido en la guerra contra el terror, envolucrandose en Irak y Afganistán. Pues, podemos ver que si el de América y Bretaña no está ganando, Irán tampoco puede haber orgullo en muchos lugros. Ahmadinejad llegó al poder con una economía alcista y las relaciones más bienes entre su estado y Europa desde la caída del chah. Su predecesor, Muhammad Jatami, fue uno de los políticos musulmánes más admirados en el oeste, tan mucho que la ONU declaró al año de 2001 el <> en honor de una frase dicho por el presidente. ¿Y qué logró Ahmadinejad desde entonces? Una economía aun dominada por corupción, un estado pintado por su odio y revisionismo.

Hasta 2009, la historia verdád de cómo existe estados como Irán quedaba en la oscuridad de una falta de interés popular. Críticos de Tehran fueron muchos, pues hubieron otros estados que elegieron apoyar en Ahmadinejad, la mayoría de ellos islamistas como Sudán, o izquerdistas como Venezuela. Los partidarios de Tehran reclamaron Sr. Ahmadinejad no fue un demagogo odioso, sino un patriota valiente confrontando el imperialismo americano en Irak. Pues en abril había descubierto un círculo de terroristas chiistas, debajo de la dirección de Hezbolá, que estaba planeando atentados terroristas en Egipto. Repentinamente la máscara de las intenciones iraníes fue expuesta. Los radicales chiistas no hubieran satisfechos sólo con el otorgamiento de derechos iguales a minorías chias en países relevantes. En países otros, como Egipto, donde no hay chiistas, Irán obra para la dominación del islamismo, y la subyugación de ellos debajo la caudillaje de los ayatulas en Tehran.

La reacción en el mundo árabe no es unida, si bien en varias instancias podemos ver un contragolpe meritorio contra Irán. En mayo, un sólo mes antes la votación en Irán, Líbano fue a las urnas para la segunda vez desde la Revolución de los Cedros en 2004. Los libanéses elegieron de nuevo en líderes que rechazan rendir los derechos de Líbano en favor de sus vecinos.

La siguiente fase, la elección en Irán, había bastante cubierto por la prensa. El hecho más importante que aprendimos de todos los acontecimientos, es que las mentiras de la tendencia islamista habían recibido demasiados créditos en los últimos años. El islamismo no es preferido en todos los países árabes o musulmanes. Yo tengo dudas que árabes que sucedieron ver imagénes de las manifestaciones en Tehran repusieron con envidia vis a vis ellos vecionos pérsicos. No estoy negando que los derechos de votantes egipcios, marroquinos, y saudíes no son libres. Yo veo en Líbano un simbólo del alternativo que puede existir en el mundo árabe.

Pues los árabes y musulmanes deben que derivir las lecciones del Líbano. Ellos tienen que entender que un país que hace solo 15 años fue destruido por una guerra civil puede restaurar su riqueza solo través el rechazo de dictaduras militares, y la formación de sociedades basadas en la regla de la ley y el respecto de la propiedad y dignidad de personas privadas. Tehran no respecta aquellos principios. Eso es porque ahora vemos oficiales iraníes señores siendo saqueados a penas de haber trabajado en favor del sístema islámico desde la fundación de la República Islámica. Aquél conducto no es characterística de la democracía que Irán reclama ser con sus elecciones. Las purgas de oficiales en respuesta de ellos opiniones es más apropriado por un régimen totalitariano como China maoista. Ya no hablamos de las personas privadas que viven en terror de los medios estatales, sino a los individuos dirigentes en la sociedad iranita.

Si los líderes de una sociedad empiezan tener miedo de la sociedad en que sirven, ellos cesan tener la calidad de liderazgo, y hacense alfeñiques impotentes. Eso es un estandarte relevante tanto a los opositores y tan sí a los partidarios activos de las políticas opresivos.

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